Cómo dañamos nuestra piel sin darnos cuenta

Nos han enseñado que siempre debemos proteger nuestra piel de elementos como químicos agresivos, el sol, la sal y el polvo. Sin embargo, existen muchas otras cosas que pueden dañarla y que no conocíamos, debido a que sus efectos pueden pasar inadvertidos de manera inmediata. Si quieres tener una piel saludable incluso en tus años más avanzados y evitar afecciones como el acné, te conviene evitar los aspectos que mencionamos a continuación.

Pellizcar los granitos causa cicatrices y daños en tu piel

Puede que muchos sepan que, por regla general, nunca debes pellizcar los granitos o barros que encuentres en tu cara. Es un no definitivo. Se debe a que esta actividad es una de las más agresivas en la piel de nuestro rostro; un simple pellizco puede llevar a cicatrices, manchas y marcas que incluso podrías ser permanentes. Además, destruye mucha piel y la deja reseca y sensible ante otros elementos agresivos.

Utilizar productos exfoliantes y mascarillas de manera excesiva

Dado que las mascarillas y productos exfoliantes están pensando para mantener una piel saludable, hidrata y limpia, parece contraproducente que podrían causar cualquier daño. Sin embargo,aquí también aplica la regla de que todo en exceso es dañino. Se debe a que estos productos, aunque muy beneficiosos, en exceso pueden afectar el balance de aceite natural en tu rostro y causar sequedad. Trata de no usarlas a diario.

No utilizar bloqueador solar para toda tu piel

Muchas sabemos que el protector solar es obligatorio para el rostro. Y si no lo sabías, te explicamos por qué: aunque no nos demos cuenta, el sol siempre está constantemente afectando nuestra piel, incluso cuando no estamos expuestas directamente. Por lo tanto, siempre es aconsejable emplear un poco del mismo,aunque se trate de un día nublado o no tengas planes de ir a la playa. También se recomienda volverlo a aplicar cada 2 horas. 

Olvidas desmaquillarte y limpiar tu rostro antes de dormir

La piel del rostro es una de las más sensibles en todo nuestro cuerpo. Por lo tanto, incluso cuando el maquillaje está pensado para esta zona, también puede causar mucho daño si lo llevamos por mucho tiempo. En consecuencia,incluso si llegas muy cansada de una fiesta o del trabajo, la limpieza es algo de lo que definitivamente no debes pasar antes de ir a dormir. Se debe a que la grasa, la suciedad y el peso del maquillaje puede causar granitos y poros engrandecidos.

Por otro lado, la limpieza no es solo necesaria si usaste maquillaje. Incluso si tu cara se siente limpia y ligera, realiza una rutina de limpieza. A lo largo del día,la suciedad y otras sustancias pueden acumularse en la piel de tu rostro y causar problemas mientras duermes. Además, hacer una rutina de hidratación la ayudará a regenerarse mejor durante tus horas de sueño.

Frotar la piel 

Cuando necesitamos secar nuestra piel, normalmente utilizamos algún trapo o una toalla para ello.Frotamos hasta que la piel queda completamente seca, sobre todo luego de lavarnos el rostro. Aunque no sea doloroso y además parezca inofensivo, lo cierto es que este es un hábito dañino para tu dermis. Se debe a que incluso con un simple frote, estarás desgastando la composición de tu piel y podrías causar arrugas y marcas de expresión.

Malos hábitos alimenticios

Todo lo que ingieras afectará directamente tanto en tu piel como en tu organismo. Por lo tanto, si empiezas a consumir mucha cafeína y azúcar, lo más probable es que empieces a notar desgaste en tu dermis y además provocar casos de acné.Asegúrate de llevar una dieta balanceada y rica en vitaminas y minerales.